En el tema de “El Gusto” nos mostraron que este sentido actúa como primer elemento de conocimiento desde la infancia, para más tarde usarlo como elemento para relacionarnos.
Generalmente comemos gran cantidad de alimentos, de muy diversos tipos, ya sean vegetales, carne, pescado, lácteos así como todos sus derivados. Hay que tener en cuenta que para comer un alimento existen unas características reguladas por la ley, para evitar así problemas por sobreexplotación de las zonas dónde se genera ese alimento (como puede ser el caso del pescado).
La cantidad ingerida de alimento varía en función de las características de cada persona, así como la cultura a la que pertenece. Los utensilios usados para comer también son diferentes, según los rasgos culturales, pues no se utilizan los mismos en en un país occidental que en uno asiático.
Seguidamente hablaron de las funciones de este sentido:
-Expresiva: mientras comemos expresamos nuestros sentimientos.
-Referencial: la comida varía en función de nuestras creencias religiosas.
-Conativa: la comida puede ser utilizada como elemento de seducción.
-Fática: puede ser objeto del inicio de una comunicación o una relación.
-Poética: en algunos platos se esmera la presentación, creando formas o figuras de diversos temas.
-Estética: comer por placer.
La exposición concluyó sobre un debate actual acerca del creciente sobrepeso y si es factible la retirada de bollería industrial de los colegios.
Otra pregunta que me gustaría hacer es si creéis que los alimentos transgénicos son peores o no tan beneficiosos como los productos ecológicos, y si habitualmente los consumís.
Sobre la pregunta que planteáis sobre si lo transgénico no es tan beneficioso como lo natural... yo creo que sí, porque el alimento natural siempre conservará más cualidades y más propiedades que otro alterado genéticamente.
ResponderEliminarYo estoy de acuerdo con Lara, un alimento natural, siempre será más benenficioso para nuestra salud porque contendrá más cualidades alimenticias que uno transgénico, además de que incluso su sabor y su aspecto será mucho mejor.
ResponderEliminarPero supongo que todos hemos comido alimentos transgénicos, porque tratamos de comer, por ejemplo, todo tipo de frutas durante todo el año, cuando cada fruta tiene su época; por lo tanto toda fruta que se encuentre en los supermercados para consumir fuera de su época, ha debido de ser cultivada en invernaderos en vez de de forma natural.
En cuanto al tema de los niños y la bollería, yo creo que es muy importante que se controle su consumo ya que muchos padres prefieren dar a sus hijos para desayunar/almorzar/merendar un bollo o similar a prepararles un bocadillo. conozco gente que trabaja en comedores de colegios públicos y que dicen que los padres siempre están encima de los menús de los niños para que coman sano pero que luego cuando los niños salen del colegio y sus padres van a recogerlos les llevan algo de bollería para merendar. si tanto se preocupan por lo que comen a medio día sus hijos, ¿no deberían preocuparse por el resto de las comidas y más aún las que hacen en casa? porque a la mala alimentación sólo hay que sumarle el sedentarismo producido por el auge de las videoconsolas...y dentro de unos años la mayoría de las personas tendrán sobrepeso u obesidad
ResponderEliminarPaula Sastre
La retirada de bollería industrial podría ayudar a evitar ese sobrepeso en los niños, cuando iba al colegio recuerdo que íbamos como locos a la cafetería cuando teníamos dinero a comprarnos cosas con chocolate, bollicaos y demás, mucha gente prefería eso antes que su bocadillo de casa. Encima hoy en día se mima mucho a los niños y pueden conseguir dinero fácilmente, por lo que tienen acceso a esos productos sin que sus padres se enteren.
ResponderEliminarEn cuanto a los alimentos transgénicos también opino que como lo natural no hay nada, supongo que consumiré pero tengo la suerte de vivir entre el pueblo y la ciudad y cuando estoy en el pueblo tengo facilidades para obtener productos naturales de gente conocida con campos, huertos, granjas... Entonces en mi familia consumimos bastante producto natural prefiriéndolo antes que el transgénico.
Coincido con mis compañeros, si a los hábitos poco saludables se le una una dieta rica en grasas manufacturadas el resultado puede ser explosivo. Las organizaciones sanitarias advierten del aumento de este problema y si observamos la sociedad estadounidense, la obesidad es una de las mayores causas de mortalidad, por encima de otras como el tabaco.
ResponderEliminarPor otra parte, respecto a los alimentos transgénicos creo que su procesamiento y control dista mucha de ser tan alarmante como lo presentan algunas organizaciones. Está claro que un alimento natural es más saludabe, pero a mi me resultaría muy incómodo comer fruta o hortalizas que estuviesen con insectos.
un alimento natural no tiene por que tener insectos, de hecho yo nunca he visto nada en las naranjas de mi abuelo (por poner un ejemplo).
ResponderEliminarSegun mi punto los alimentos transgenicos no tienen ni la mitad de vitaminas que los naturales, y el sabor no tiene nada que ver.
Donde haya un alimento natural, yo no cogeré un transgénico.
En cuanto a retirar la bollería en los centros educativos, bueno, podría ser una iniciativa, pero está claro que la bollerá que no se coman los niños en el cole, se la van a comer luego en el quiosco de enfrente...
Yo creo que ahí las medidas las ponen los padres: si tu hijo tiene sobrepeso, hazle un bocadillo o lo que sea para ir al cole y no le des dinero para que pueda comprar bollería.
Aun así, no veo correcta la prohibición total de la bollería a los niños. Una vez a la semana, por ejemplo, si que podrían comer alimentos grasos y no creo que pasase nada.